El director ejecutivo de la Coordinadora de Instituciones Privadas Pro las Niñas, Niños, Adolescentes, Jóvenes y sus Derechos (Coiproden), Wilmer Vásquez, informó que 274 menores de edad han perdido la vida de forma violenta entre enero a mayo del 2024, e insta al Estado a tomar medidas urgentes para evitar más muertes en Honduras.
«El año 2022 se cerró con 569 asesinatos entre 0 y 30 años de edad, 713 en 2023, y en cinco meses del 2024 van 274 asesinatos, un 6 % de incremento», lamentó Vásquez.
Las últimas muertes registradas en el país son de dos menores en edad similar que perdieron la vida de forma violenta.
Las víctimas han sido identificadas como Richard David Ávila Nieto, de 14 años, quien cursaba décimo grado en la carrera de Banca y Finanzas en el Instituto Jesús Milla Selva.
También Moisés Daniel Cerrato, de 13 años de edad, quien presuntamente murió a manos de compañeros de internamiento en el centro Nuevo Jalteva, en Cedros, Francisco Morazán.
Estas últimas dos muertes se sumarían a las 274 ya registrados haciendo un total de 276 menores de edad que han perdido la vida de forma violenta.
Indiferencia del Estado
La situación de vulnerabilidad en niños y niñas en Honduras preocupa a defensores de derechos humanos ante la falta de compromisos para evitar que la violencia siga atacando a los infantes.
«En otro país esta situación sería una tragedia y el Estado estaría tomando todas las medidas al más alto nivel para poder garantizar la protección integral de los niños y las niñas», enfatizó Vásquez.
Departamentos con mayor incidencia
Según datos de Coiproden, los departamentos con más hechos violentos registrados son Francisco Morazán, Cortés y Olancho.
Monitoreo de muertes en accidentes viales
Al mismo tiempo Coiproden registra 22 víctimas de accidentes viales en el mes de mayo, de los cuales 21 fueron hombres y 1 mujer.
Mientras que 18 fueron jóvenes entre los 18 a 30 años y cuatro niñas y niños de 0 a 17 años de edad.